Ni pude encerrar el pajarraco en una jaula de grafito.
Hay situaciones que no se pueden manejar, no hay porqué, no interesan las consecuencias, o si, interesan, por eso movilizan tanto nuestro interior.
Supongamos que: tomamos un pincel, o lo toma una persona que conoce un poco su manejo, y que hace? sale describiendo curvas con los pelos o las cerdas, que tienen cierta coherencia. Colores mezclados, unos continuando a otros, todos a continuación de un relato que está en pocos cerebros, armado a medias. O un lápiz, o crayón, y que mezclados con la sal del río apuran a las sombras sedientas de la siesta. La calabaza infaltable que interrumpe una idea, la intención del beso que sugiere lo mismo. Después, que encontramos. Cambiando unos ángulos se ve distinto a lo real, pero no importa. Seguro es muy parecido a lo pensado, ideado, imaginado. Luego vienen los adornos, pero la idea básica ya está clavada, y la vivencia inmortalizada.
No todo es andar por andar. Hay motivos para cada movimiento, solo que lo sabe el destino nada más. Y cuando se concreta? La idea es estar cada momento, vivir el detalle, dejar ser a cada pajarraco que se cruza, expresar su vuelo torpe o su quietud. Lo que nunca se hizo, se deliró tan solo, se concreta como en un curso acelerado de la vida. Suerte de la vida, entretelones de misterio, cada paso, cada mata que se esquiva tenía reservada una sorpresa, y el silencio como respuesta. La soledad no interrumpe nada, solo ayuda, abroquela, arrincona los pensamientos, los pone en tensión, dedos al piso y en un instante salen disparados, juntos con la acción que no pide ayuda a los controles. No hay control, sale todo como sangre a presión, como lágrimas de alegría, como palabras de un susto, como ideas hacia el papel, como amor del corazón.
Hacer caminos tan largos, una vez más, para que? su razón cae de pocos días, de muchas ondas, de inevitables podios y sortilegios.
Este río que se ha metido en mi alma, viene cuando quiere, cuando lo dejan, se desvía, embanca. Lo hemos bebido y caminado, lo han pintado y dibujado. Lo hemos rodeado y preguntado.
Es inútil defenderse, sigue su camino, hace lo que debe hacer entre telas arrugadas y las mieles del deseo irrefrenable. Hermosura de la vida, lindura del destino, asociación de deseos. Amor.